Agustín se despierta una mañana con una cabeza distinta, sorpresivamente más grande, su pelo está reseco, tiene una trompa, dos orejas inmensas y colmillos. De nada le sirve lo que le dicen sus familiares y el médico, está desconcertado. Pero, a pesar de todo, el repentino cambio de aspecto le trae apoyos y rechazos, fama y trascendencia dentro y fuera de los límites de Bahía Marazul, que hasta ese momento era una apacible y aburrida ciudad a orillas del mar. Innumerables aventuras lo llevan a descubrir lo ocurrido y a resolverlo, aunque quedan involucrados en ello todos los habitantes de Marazul.